Así es la vida de los estudiantes que combinan las clases con el trabajo. Y no sólo ellos, normalmente todo el mundo va tan ocupado que no hay tiempo ni para descansar lo suficiente. Aquí están dos compañeras de clase que aprovechan los 3 minutos de pausa para echar un sueñecillo, las pobres. Es algo cotidiano. Hay días en los que he llegado a ver a todos durmiendo a la vez de esta guisa... alucinante. Y en los trenes, para qué contar. Todo el mundo va durmiendo... ¡incluso algunos lo hacen de pie y todo!
Poco a poco empieza a cobrar sentido el que todas las calles tengan su máquina de café...
20 diciembre 2006
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1 comentario:
Con lo sagrado que es dormir... Jajajajaja.
Pues alla ellos, durmiendo por todos lados...
La verdad, no se que poner aqui, ya que eso ya lo hemos hablado, jajaja.
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